Ahí va! Mesaorvidao la leche puesta!La verdad que hacía tiempo que quería hablar de Jean Charles de Castelbajac, ese hombre de mente compleja y colorida (los artistas son así) que paradójicamente vive en un perpétuo estilo elegante (porque él puede hacer mamarracherías pero vengan a mí los trajes de otros), cuyas creaciones extravagantes y poco ponibles en lo general no dejan indiferente a nadie. Ya decía Oscar Wilde que es mejor que hablen de tí aunque sea bien, y puede que le guste tirar para lo extremo ya que sus súper amigas son del palo de Lady Gaga, Katy Perry, Beyoncé o Dita von Teese, que como sale con su hijo Jean Mari se verá en la obligación de contentar al suegro).
En definitiva, brilli brilli por doquier.
¿Está el enemigo?
No se por qué tanto lío, yo voy supercómoda así en el avión
Carolineeee,condúcenos hasta la luzzz
Estoy que lo rompo
If you wanna be my loverrr,... ay que esa no eraNo voy a contar que nació en tal sitio, creció como todo el mundo y empezó en el negocio enchufado como otros tantos, porque esas historias aburren y para eso está ya San Google o la Fnac.
A cambio os diré que lo descubrí hace años en Londres gracias a una tienda que tenía (la cerró hace poco) en Conduit Street, para los que no se sitúen mucho es una calle céntrica cerca de Oxford Street donde está también Vivienne Westwood, Martin Margiela o Burberry, por decir tres animalitos. Me quedé atrapada con jerseys con crines de caballo que parecían de cómic y prendas con estampados de Muppets, cosa que luego ví que es un hilo conductor en sus creaciones, que va cambiando cada temporada según le da el pálpito: Bambi, South Park, Donald, Kermit, Pluto, Félix el Gato o lo último, los tres cerditos y el lobo, ¿cómo te quedas?
Pero a él le da igual todo, hace lo que quiere y a quien le guste mejor, y su público tiene. Sino no se explica que su única flagship store esté cerca del Forum de Les Halles pero escondidísima y con unos horarios más raros que el obrador de un convento. Eso sí, es entrar y ver un cuadro gigante con su cara en Lego(ego-ego), y tener altas probabilidades de encontrártelo tirado en un sofá. Una experiencia colorídamente religiosa.
Tengo que decir que, a pesar de que parezca una crítica en el fondo siento una relación de amor-odio con este hombre, esto es, el 70% de su ropa no me la pondría (a no ser que fuese una estrella de la música que, todavía, no es el caso) pero el resto pueden complementar el armario con cosas que te sacan de un apuro por tener un toque diferente. Y eso sí, los complementos suelen ser geniales (
los relojes de Lego, must have).
El año pasado tuve la suerte de comprarme varias cosas de la que fue, para mí, una de las mejores colecciones que hizo, basada en el mundo de los piratas. Aquí os dejo con mis adquisiciones
Hasta luego Lucas!! Digo...Gustavo!
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